Diez pasos para
trabajar con los ángeles:
1.- Hazle sitio en tu vida a los ángeles.
Si quieres que los
ángeles se sientan a gusto contigo, tienes que hacer que
tu mundo - pensamientos,
sentimientos y entorno - se parezca más al de ellos.
Los ángeles se sienten
cómodos con pensamientos de paz y amor, no con
pensamientos de
irritación y agresividad.
Aíslate de cualquier
distracción, quédate en silencio en tu lugar favorito y
comulga con los ángeles.
Simplemente, háblales a los ángeles de tus
problemas. Habla como si
lo hicieras con tu mejor amigo. Y escucha. Guarda silencio y permanece a la
espera de los pensamientos que los
ángeles pondrán en tu
mente.
2.- Haz las oraciones en voz alta:
Pero no es necesario que
hables para que te presten atención, los ángeles han respondido a muchas
oraciones silenciosas o a un intenso deseo del corazón.
Pero obtendrás una
respuesta más eficaz si les hablas en voz alta.
Tu voz tiene poder. Las
oraciones habladas adoptan diferentes formas:
Canciones e himnos,
oraciones estructuradas y sin estructurar. Se puede
combinar todo esto con
decretos y fíats. Los decretos permiten al hombre y
a Dios trabajar juntos
para generar cambios constructivos. Los fíats son
afirmaciones poderosas y
breves. Haz tus decretos y fíats en voz alta y firme.
3.- Utiliza el nombre de Dios
Dios está dentro de
ti, y al utilizar la energía de Dios que hay en ti para
dirigir a los ángeles,
ellos te pueden responder con todo el poder del
Universo.
El fuego que Dios te da
por ser hijo o hija, esta Chispa Divina es el poder
de crear en el nombre de
Dios y de darle órdenes a los ángeles.
Cada vez que dices:
“YO SOY…”, estás diciendo : “Dios en mi es …” y
así atraes hacia ti lo
que dices a continuación.
4.-
Ofrece tus oraciones y decretos todos los días. Los ángeles siempre están listos.
Pero nosotros no siempre sabemos cómo llegar hasta ellos. La mejor manera es
comulgar con ellos diariamente. Al hacerlo así, no solamente te ayudas a ti
mismo, sino que ayudas a mucha gente que incluso no conoces. Los ángeles buscan
personas que invoquen habitualmente la luz de Dios para asociarse a ellos, para
lograr la curación del planeta.
Cuando encuentran a
estas personas, envían Luz a través de ellas para ayudar a los que están en
peligro de enfermar o de sufrir crímenes violentos o desastres naturales. Tus
oraciones pueden generar enormes cambios.
5.- Pide ayuda
Incluso después de
establecer una relación con los ángeles, tienes que
acordarte de pedir ayuda
cuando la necesites. Los ángeles respetan tu
libre albedrío. En raras
ocasiones intercederán sin que se lo pidas.
Normalmente esperan
cortésmente hasta ser llamados. >
6.-
Repite los decretos y oraciones
Las oraciones y decretos son más eficaces
cuando los repites, porque cada vez que los dices, están dando más energía de
Luz a Dios y a los ángeles. Los ángeles utilizan esa energía como si fuera una
semilla, y le añaden más
energía de Luz cuando
van a responder a tu petición.
7.- Envía tus oraciones a la dirección correcta
Si necesitas
protección, llamas a los Ángeles de Protección. Si quieres
arreglar una relación,
llamas a los Ángeles del Amor.
Los Ángeles tienen
diferentes trabajos, y utilizan energías de diferentes
frecuencias para
realizar esos trabajos. Puedes llegar a conectarte de manera más íntima con los
Ángeles cuando llamas al Arcángel cuyos Ángeles están, especializados en
ocuparse de lo que quieres que se haga.
8.- Sé específico
Los Ángeles
responden a los llamados con precisión y se enorgullecen de
hacerlo así. Cuanto más
específica sea la petición, tanto más específica
será la respuesta.
Mientras vivas en armonía con la Fuente Universal y
dediques tus energías a
ayudar a los demás, las huestes angelicales te
ayudarán hasta en los
detalles más pequeños de tu vida.
9.-
Visualiza lo que quieres que pase
Puedes aumentar el
poder de tu oración manteniendo una intensa imagen mental de lo que quieres que
pase. Además, puedes visualizar una luz brillante alrededor del problema o
situación. Puede ser de ayuda concentrarte en una fotografía.
10.-
Espera sorpresas
La capacidad que
tienen los ángeles para responder a nuestras oraciones
depende del efecto
acumulado de nuestras acciones pasadas, de nuestras
buenas o malas acciones
de ésta y otras vidas, o sea, de nuestro karma. Los
ángeles están sujetos a
las leyes del karma. Cuando oramos y damos devoción a los ángeles, a veces
éstos pueden disminuir los efectos del karma, pero a menudo sólo pueden
reducirlo.
Los Ángeles escuchan
todas las oraciones, pero para que las peticiones
sean concedidas deben
cumplir tres condiciones:
- No pueden interferir
con el Plan que Dios tiene para tu alma o con el
karma.
2.- No pueden ser perjudiciales
para ti u otras personas.
3.- El momento debe ser
el adecuado.
La oración siempre da
frutos, simplemente, tiene que saber dónde mirar.